El deporte de raqueta siempre ha estado muy presente en la vida de Adrián Sestelo, empezó jugando al tenis junto a su hermano Jose en el Club Social La Salina de San Fernando.
Allí pasaba largas horas disfrutando y aprendiendo, una primera toma de contacto que llegaba gracias a su padre, quién le introdujo en este pasatiempo y le inculcó los valores del deporte.
Posteriormente con el auge del pádel Adrián decidió probarlo quedando prendido de esta nueva disciplina y haciendo de su «nuevo hobby», su profesión«.
El isleño lleva desde los quince años impartiendo entrenamientos y confiesa no cansarse de este deporte. Actualmente dirige una Escuela de menores y de adultos en San Fernando en la que imparte clases de todos los niveles, desde iniciación a alta competición y compagina esta labor con la de Seleccionador provincial de menores.
Adrián es un gran defensor de la práctica no sólo a nivel competitivo, sino también lúdico por todos los beneficios que aporta a grandes y pequeños.
«Grandes jugadores de Cádiz se dedican profesionalmente al pádel»
¿Cómo recibiste tu designación como Seleccionador?
Siempre me ha encantado entrenar a los niños, sin embargo, tenía mis dudas con respecto a la competición. Animado por varias familias, empecé a adentrarme en la competición de menores y me encantó.
Por ello, me presenté al cargo y cuando la FAP, a través de su Delegado Territorial, me comunicó que había sido seleccionado, me llevé una gran alegría.
¿Cuáles son los aspectos que más te motivan a trabajar como Seleccionador de menores?
Son muchísimas las motivaciones, el deseo de competir, el afán de superación, el trabajo constante y en equipo, la disciplina, la entrega, pero sin duda, la felicidad y la satisfacción que transmiten los menores no tiene precio.
¿Cuáles son las principales dificultades que prevés encontrarte?
Este es mi primer año como Seleccionador y sé que tengo un gran camino por delante que recorrer. Mis principales dificultades han sido, sobre todo, conocer, desde el aspecto técnico a chicos y chicas de categorías superiores a los que no suelo entrenar normalmente.
Cádiz es una provincia que tiene un gran nivel de jugadores y jugadoras de pádel de menores y el abanico es muy amplio.
¿Cuál es tu diagnóstico inicial sobre el nivel y potencial de la Selección?
Tenemos muchísimas suerte en nuestra provincia, el nivel es muy alto, existen grandes escuelas y entrenadores de menores por lo que valoro muchísimo el trabajo que todos están realizando.
Con respecto a la Selección, por supuesto, mis expectativas son muy altas, ya que deseo que ambas selecciones, masculina y femenina, estén en la primera división andaluza.
¿Qué recomendarías a los jugadores que aspiran a formar parte de la Selección?
Les animaría a seguir trabajando, sin perder la ilusión, el esfuerzo y el deseo de competir. Esta es una carrera de fondo, con sus altos y sus bajos, y sólo unos pocos pueden ir seleccionados. Sé que es complicado pero en esto consiste la competición.
¿Tu mayor deseo para Cádiz?
Nuestra provincia es y será una gran cantera de niños y niñas que practican este deporte. Tenemos grandes jugadores que se dedican profesionalmente al pádel, Juan Lebrón, Álvaro Cepero, Javi Leal, Miguel Benítez, Julia Polo, Nuria Rodríguez, Marta Barrera, Rafael Méndez… que se criaron y aprendieron en nuestras escuelas.
Deseo mantener ese nivel en la competición y llevar a lo más alto a ambas categorías.