El Pádel, un deporte para jugar entre amigos
¿Quieres practicar deporte y no terminas de encontrar algo que te motive?
Uno de los motivos de abandono más frecuentes para las personas que practican ejercicio es que el gimnasio resulta aburrido y repetitivo. Por eso, te animamos a practicar deportes en grupo. ¿Has pensado en jugar al pádel? El pádel tiene muchas ventajas en este sentido, te contamos por qué es considerado un deporte tan social.
Montar en bici o salir a correr puedes hacerlo solo. Sin embargo, para jugar al pádel necesitas sí o sí a tres amigas o amigos. Esto ya de por sí motiva. Elige a personas con las que sabes que te puedes divertir jugando. No importa si han jugado más veces o son nuevas en el pádel, lo importante para que empieces es practicarlo en confianza.
Los deportes en equipo son más divertidos
Tener feedback con tus contrincantes, celebrar un buen tanto con tu compañero, o reír mientras juegas es algo positivo que nuestra mente y cuerpo agradecen. Practicar deporte no tiene por qué ser algo serio, es un momento de distensión. Por eso, además de esforzarte, recuerda divertirte, es la clave para querer continuar jugando a pádel.
Y, ¿cómo hago para implicar a mis amigos?
Es fácil. El pádel no requiere mucha preparación física, aunque como en cualquier deporte siempre es aconsejable que, si se tiene alguna lesión, se consulte primero con un especialista. Y la equipación la puedes encontrar por precios muy asequibles. Decide una hora y un lugar que se adapte a todos y ¡a divertirse!
El antes, durante y después
Programar una cita para jugar a pádel con tus amigos puede servirte de motivación para enfrentar los agobios que te surjan a lo largo de la semana. Escribe a tus amigos unas horas antes para animar el partido. Cuando estés en la pista, te estarás divirtiendo y ni te darás cuenta de que ya se ha pasado el tiempo. Al terminar, haz del momento de recuperación un acto social, charlando de cómo ha ido el partido mientras te hidratas con una bebida para deportistas.
Muchas pistas
El hecho de que los clubes de pádel y los centros deportivos municipales cuenten con tantas pistas de pádel facilita no sólo que puedas reservar sin mucho problema, sino que además puedas conocer a gente, ver cómo juegan los demás y, quién sabe, proponer partidos cruzados entre parejas que habitualmente vais a la misma hora. Prueba a mezclarte con la gente, ¡seguro que disfrutas más todavía!