Hagamos balance de la temporada World Pádel Tour 2015 en tu primer año al lado de la canaria 

Empezamos con muchas ganas. Las dos habíamos terminado la temporada anterior con muy buenos resultados al lado de nuestras ex compañeras y aspirábamos a lo más alto, al número uno. Sabíamos que era un reto difícil tratándose de nuestro primer año. Cambiar de pareja es difícil, requiere tiempo. Hemos hecho un esfuerzo todo el equipo, desde Madrid y desde Barcelona para adaptarnos rápido, pero evidentemente se tarda y eso nos ha perjudicado con respecto a otras duplas que ya estaban unidas desde hace varios años.

El balance es muy positivo. Hemos ido de menos a más. Acabar el año ganando los dos últimos torneos ha sido especial, no sólo por la sensación de haber ganado, sino por la sensación de que habíamos evolucionado. Hemos jugado en los últimos tres meses mucho más compenetradas y con las ideas muy claras y eso se ha notado. Se notó en Valencia y en el Master Final.

Ha habido momentos duros en la temporada. Muchas finales sin título…

La lesión de Marta de la muñeca fue determinante. Yo lo vivía desde fuera, desde la distancia, y como ella es más bien reservada, yo nunca supe realmente lo mal que lo estaba pasando. Más adelante me lo confesó. Me dijo que estaba preocupada y descentrada. Los médicos le aseguraban que si no se recuperaba habría que operar. Y claro, tener esa inquietud en la mente le impedía jugar con tranquilidad. Aunque era la muñeca izquierda, ella la utiliza muchísimo para el revés. Si la tenían que operar era un problema. Y para mí no saber cómo ayudarla fue muy difícil

Pero salísteis adelante…¿Cúales crees que han sido las claves del éxito Salazar-Marrero?

Al principio de la temporada, cuando nos enfrentábamos por primera vez a una pareja, básicamente intentábamos ver por dónde teníamos que colocar la bola y por dónde les podíamos atacar. Pero a medida que fue pasando el año, esos mismos partidos los hemos sacado con más claridad. La clave Salazar-Marrero ha estado en ser muy agresivas y en estar muy bien físicamente, en especial a final de temporada.

¿Qué podemos esperar de Salazar-Marrero para la temporada 2016?

Nuestro objetivo en 2015 ya era estar de número uno aunque sabíamos que era difícil. Pero este año ya estamos mucho más acopladas, nos conocemos mucho más y sabemos cómo tirar la una de la otra en los momentos difíciles. Este 2016 sí creemos que podemos ir a por el número uno.

¿Cómo has visto la temporada del Circuito femenino World Pádel Tour?

Ha habido mucha menos pugna por el número uno. Con el invicto de las gemelas, a mitad de temporada ya sabíamos que acabarían en lo más alto. En la temporada 2014, la primera plaza del ránking se estuvo disputando hasta el último torneo. Aunque este año hemos vivido partidazos de un nivel increíble que no se había visto otros veces.

Marta y tú no os conocíais al principio. ¿Ya sois amigas fuera de la pista?

Recuerdo la primera vez que viajé desde Madrid a Barcelona para entrenar con Marta. Apenas había cruzado tres palabras con ella en toda mi vida. Era mi primer fin de semana allí y me hospedaba en su casa, con su marido, al cual tampoco conocía de nada. Y encima era el 16 de enero, su cumpleaños, y claro, tenía que llevarle un regalo. No sabía qué regalarle, no conocía sus gustos. Afortunadamente me decanté por un bolso y le gustó mucho (risas).

Anécdotas aparte, nuestra relación fuera de la pista es estupenda. Somos de la misma edad y tenemos gustos muy parecidos. Además lo que más me fascina de ella es lo rápido que ha evolucionado en este deporte para llevar apenas cuatro años en él. Estoy encantada con ella, dispuesta a seguir ayudándola en todo lo que pueda.

Y para que no todo sea en positivo, ¿cuál es el talón de Aquiles de esta pareja?

(risas) ¿Tengo que contarlo públicamente? Nos falta acoplarnos más, conocernos todavía mejor. Hay mucho aún por mejorar…

A finales de enero Alejandra Salazar volverá a la ciudad condal, donde pasará casi un mes al lado de Marta Marrero para preparar la temporada 2016. Que tiemblen las rivales.